Los muslos son donde ambas piernas están separadas entre sí y la piel flácida en esta zona o la presencia de grasa, crea problemas físicos y visuales. Vestirse puede ser un desafío por las irregularidades en esta zona y por el hecho de que entre las piernas es donde también sudamos, el sudor que queda entre la piel produce mal olor y el frotamiento de la piel produce dermatitis. Ambos afectan negativamente el estado social y psicológico de la persona y, después de la operación de lifting de muslos, el paciente podría tener el cuerpo que deseaba.
El procedimiento quirúrgico tiene como objetivo remodelar el área del muslo y lograr un buen contorno, además de eliminar la mayor cantidad posible de tejido adiposo y piel flácida. Sin embargo, la tensión debe mantenerse razonable, ya que una tensión excesiva en esta área haría que las puntadas se abran.
A diferencia de otras cirugías, el lifting de muslos no requiere un período de preparación. Cualquier persona que no tenga ningún problema de salud que pueda prevenir la cirugía puede someterse a un lifting de muslos. Las pruebas preliminares de rutina y el examen físico se podrían realizar en la mañana de la cirugía.
Si la piel flácida no es excesiva en el área del muslo, este tipo de cirugía se practica comúnmente. Solo se quita la piel de la parte superior del muslo y las cicatrices quedarían en la ingle para quedar ocultas debajo de la ropa interior.
Si la piel flácida se extiende hasta la rodilla, entonces se realiza este tipo de cirugía. La cicatriz sería desde la ingle hasta el borde de la rodilla y dado que las cicatrices permanecerán en el interior de la pierna y se volverán del color de la piel con el tiempo y no habría ninguna molestia.
Preoperatoriamente, se marca al paciente en posición erguida y acostada para la piel que necesita ser removida. Además, la cicatriz de la incisión se planifica durante el marcado.
En general, la cirugía se realiza bajo anestesia.
En la primera etapa, si el paciente ha acumulado tejido adiposo, se extrae mediante liposucción. Luego, se eliminan los tejidos sobrantes en el área marcada. Los drenajes se utilizan para eliminar la sangre que se acumulará en el interior, estos drenajes generalmente se retiran al segundo día. Las incisiones se cierran para que permanezcan en la parte interna del muslo. Se forma un rastro en forma de línea recta. Los puntos suelen ser puntos internos y no es necesario quitarlos. La operación se completa aplicando una venda o un aparato ortopédico para los muslos al paciente.
Los drenajes se retirarían el primer día y la estancia hospitalaria de 2 días sería suficiente para la recuperación del paciente. El uso del corsé durante tres a seis semanas es necesario para una forma más suave e incluso después de la operación las cicatrices son visibles, se volverán más indistintas entre seis meses y un año.
Reflejando sus objetivos estéticos más preciados mientras preserva la individualidad
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